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                                    result%u00f3 muy estimulante. Parece una locura, pero cuanto m%u00e1s lo desarroll%u00e1bamos, mejor funcionaba como un divertido veh%u00edculo para la acci%u00f3n%u00bb. Y la verdad es que hay acci%u00f3n en abundancia en The Holy Roller.Despu%u00e9s de una largu%u00edsima ausencia, Levi encuentra su ciudad natal en un estado lamentable. No solo sucia y empobrecida, sino revuelta por el auge del movimiento supremacista blanco. No obstante, lo m%u00e1s importante para %u00e9l, de entrada, ser%u00e1 el reencuentro con su padre, que sigue tratando de imprimir en su cabeza las ra%u00edces hebreas de las que Levi huy%u00f3 hace 20 a%u00f1os. Adem%u00e1s de repudiar su pasado familiar, Levi tambi%u00e9n reneg%u00f3 de su pasi%u00f3n por los bolos. Pero el ataque de un grupo de neonazis en plena calle lo obligar%u00e1 a rescatar su antigua bola de bolos para hacer frente a sus agresores. El problema es que, durante el enfrentamiento, mandar%u00e1 al hospital al hijo de un magnate racista local, que pondr%u00e1 precio a su cabeza. En ese momento, Levi decide que, si no puede contar con la ayuda de las fuerzas del orden, se tomar%u00e1 la justicia por su mano convirti%u00e9ndose en un justiciero enmascarado. Para ello se asociar%u00e1 con un viejo compa%u00f1ero de instituto que lo ayudar%u00e1 a dise%u00f1ar un disfraz a prueba de balas y, tambi%u00e9n, a proveerse de unas armas muy especiales: una combinaci%u00f3n de tecnolog%u00eda punta y bolas de bolos con la que tratar%u00e1 de introducir a golpes algo de sentido com%u00fan en la cabeza de sus oponentes. El resultado es una obra muy divertida que, adem%u00e1s, reflexiona sobre las lacras de los Estados Unidos de hoy d%u00eda.UN C%u00d3MIC QUE AGLUTINA SUPERH%u00c9ROES, SUPREMACISMO Y%u2026 %u00a1BOLOS!C%u00d3MIC AMERICANO %u2022 OTO%u00d1O 2025 P%u00c1G. 104 // 
                                
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